ESPECIAL IRON MAIDEN: LA GUADAÑA DE LA DISCORDIA
Fecha Jueves, 16 de Enero del 2020 (17:53:28)
Tema Novedades


El compendio de todas las piezas del disco forman un sólido y convincente amasijo de buenas composiciones, con un Bruce pletórico y una banda que ponía sobre la mesa las ganas que había de agradar desde que volviesen en el 2000. ...










En el 2003, ya con la reunión a flote y una formación establecida con 3 guitrarristas compenetrados, la doncella tenía la difícil tarea de igual o superar el que para muchos es uno de los mejores discos que ha grabado Iron Maiden en su dilatada carrera, es decir, Brave New World. Por supuesto, con Dance of Death no lo consiguieron, pero lograron demostrar que el barco seguía en rumbo, en una producción que suponía la confirmación de que los tintes más progresivos mostrados en la obra del 2000, seguían estando ahí, y se irían acentuando conforme pasasen los años.

El invento empezó con polémica. Todavía recuerdo cuando, habiendo mostrado la portada en la red, todo el mundo pensó que aquel horrible experimento digital estaba inacabado...¡y no!. Aquella fea ilustración terminó apareciendo sobre la tapa del esperado disco, y todos nos preguntamos el por qué de aquel desacierto...es más, hubiésemos preferido a Eddie guadaña en mano sobre un fondo en negro, o con menos elementos alrededor, pero no ese carnaval del mal gusto. Menos mal que el adelanto de "Wildest Dreams" no parecía regir los patrones de la calidad de la portada, y a pesar de no ser ni de lejos el mejor single de su carrera, era resultón. Mejor fue el segundo sencillo "Rainmaker", que aquel sí, era uno de los temas que más fuerte pegaron del disco, y que más representaban la calidad de un álbum que ha ganado puntos con los años. Solo hacía falta leer las dispares críticas del mismo, que se movían en un extremo u otro, tirando tantas flores como huevos al polémico lp.

La producción corrió a cargo del propio Harris, acompañado de Kevin Shirley, alejándose el sonido del logrado en Brave New World, para crear un rango más opaco que se mantendría de hecho en su siguiente disco de estudio. Pero ahí, cuestión de gustos de cara al pulido final, puedo decir que el sonido de The X Factor también es borroso, y tiene un encanto especial. No obstante, no se puede hablar jamás de una mala producción en un trabajo de Iron Maiden, pero si de más acertadas, o menos, y este álbum tiene la balanza muy equilibrada como para tirarlo por la borda. ¿Cómo te atreverías a decir que temazos como la teatral "Dance of Death", la épica "No More Lies" o "Paschendale" no son dignos?. Por supuesto, el disco posee una buena tanda de clásicos que ya podrían estar en cualquier setlist de Iron Maiden que se precie. No son tan candidatas otras piezas notables menos laureadas como "Face in the Sand" o "End Of Innocence", e incluso la enorme, cuidada y emocional "Journeyman", que probablemente, sea una de las piezas a bajas revoluciones más cercanas al témino "balada" en la historia de los ingleses. Y, sea como sea, el caso es que el compendio de todas las piezas del disco forman un sólido y convincente amasijo de buenas composiciones, con un Bruce pletórico, y una banda que ponía sobre la mesa las ganas que había de agradar desde que volviesen en el 2000.

La gira, como no podía ser de otra manera, fue un éxito. En el propio Madrid pudimos ver a Iron Maiden acompañados de Gamma Ray en un conciertazo tan teatral como repleto de elementos marca de la casa. Para el recuerdo de aquel tour editaron un Death on the Road no del todo acertado, con un audio muy conseguido, pero que en su versión video me sigue pareciendo imposible de ver completo por la gran cantidad de cámaras que se usan en cada segundo de visionado.

Recientemente se ha reeditado el álbum en digipack, conservando su arte, pero conteniendo el remaster del año 2015, cuyo sonido resulta menos embarullado, manteniendo la esencia del original. Como curiosidad, decir que es el único trabajo de Iron Maiden que pasó por aquella moda de editar los discos en 5.1 (que algunos aún conservan), y que vale la pena su escucha, simplemente para poder disfrutarlo desde otra perspectiva sonora.

Dance of Death es disfrutable del primer al último tema, a pesar de no estar entre lo mejor de Iron Maiden...¿alguien lo discute?.

Ya se encuentra a la venta la última tanda de reediciones de Iron Maiden en ediciones remasterizadas y digipack.

En esta ocasión se reeditan Dance of Death, A Matter of Life and Death, The Final Frontier y The Book of Souls a través de Parlophone, siendo A Matter of Life and Death en esta ocasión, el álbum que cuenta con una edición deluxe con una reproducción del Eddie de la portada en figura y parche.

Todos los álbumes están remasterizados a partir de las reediciones que se hicieron en 2015 de todos ellos para iTunes y su correspondiente edición en vinilo, siendo presentados en edición digipack.









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