SLIPKNOT - .5: THE GRAY CHAPTER

Álbum:Slipknot - .5:The Gray Chapter
Sello:Roadrunner
Fecha lanzamiento:2014

Cuando parecía que Stone Sour, la banda de Corey Taylor, comenzaba a ser prioridad. Cuando tras la pérdida de Paul Gray parecía todo una incógnita. Cuando Joey Jordison, una de las partes fundamentales de la banda de Iowa abandonaba el barco...van Slipknot y nos sorprenden a todos con el anuncio de un nuevo disco de estudio, sin sus dos miembros perdidos, uno de modo trágico, y el otro por abandono, y sin Rick Rubin para la grabación, quien se encargó del sonido del anterior All Hope Is Gone, un álbum que creó opiniones muy diferenciadas pero que el paso del tiempo ha sido un aliado para el, porque hoy por hoy, es otra piedra angular dentro de su discografía...¿lo será éste nuevo .5: The Gray Chapter?.

Pues la respuesta a todo lo anterior expuesto aguarda detrás de la figura huesuda de la portada (una de las mejores de su carrera, por cierto), con un álbum que en gran parte, sigue la senda del anterior en cuanto a variedad compositiva, pero con una producción quizás más pulida y limpia que la de All Hope Is Gone, y una batería por parte del nuevo miembro (sin nombre que conozcamos) mucho más discreta y comedida que la de Joey. Y a priori, os parecerá que pueden ser incluso puntos negativos, pero en realidad no lo son, haciendo de éste The Gray Chapter algo dinámico, diferente, pero igualmente personal.

XIX comienza muy oscuro, inquietante es la palabra...Corey da pistoletazo sus cuerdas infranqueables, tan eficientes como siempre, con esa sensibilidad rasgada tan peculiar que le hace único, y tras algo más de tres minutos de intensidad cargada de samples y feeling (quizás como tributo a su ex-bajista), Sarcastrophe rompe esa nube en la que nos introduce la banda, a través de unas líneas de bajo que auguran la caña que viene después, un corte muy en la onda de su debut o Iowa, pero quizás con la rabia más contenida que en aquellos años. Como he dicho, la batería, a pesar de ser espectacular, es más plana y "simple" que la de Joey, que por un lado, supone un mayor protagonismo para el resto de miembros, aunque siempre habrá quien necesite ver y escuchar a Jordison tras los parches. Se agradece el no dejar demasiado protagonismo a elementos sampleados y scratches, centrándose en la definición METAL para las composiciones.

Más veloz y con más furia nos encontramos con un AOV donde Corey combina su lado melódico con sus furiosos alaridos, en un corte directo, a la yugular, para adentrarnos en los 3 temas que ya se conocían antes de la publicación del álbum. Un The Devil In I que forjado a base de riffs grandiosos y duros por si solos, nos deja uno de los momentos más intimistas y calmados del álbum en el estribillo, combinando furia y feeling a partes iguales. Killpop es sigiloso, más comercial y muy atractivo musicalmente hablando en cuanto a la base rítmica, muy potente para ser un medio tiempo. Skeptic es 100% Slipknot, tratando de emular los primeros tiempos de la banda, pero con un estribillo no tan corrosivo como aquellos iniciales, y una base musical mucho menos recargada y sencilla.

Lech es el punto de inflexión del álbum, en la que más juegan con sonidos efectistas para deleite de los menos puristas, dejando aun así rienda suelta a un gran amasijo de riffs "made in Thomson", aunque el corte en sí no sea nada novedoso ni tenga peculiaridades que lo hagan único dentro su discografía y el conjunto del lp. De nuevo esa nostalgia oscura se hace cargo del peso del disco en Goodbye, otro pasaje totalmente encajado en un álbum tributo a una enorme pérdida. Nomadic gustará a aquellos que adoren los primeros tiempos de Stone Sour, ya que la bajada de revoluciones y estructura es más de estos que de los propios Slipknot, aunque ciertos elementos sigan siendo inconfundibles, así como los bruscos giros musicales. The One That Kills The Least nos presenta poco más o menos un cliché de lo que vienen a ser los temas más radiables de Slipknot en los últimos años, mientras que para finalizar la explosión nos dejan el experimental Custer, un movido corte en el que se experimenta con todo lo experimetable en cuanto a samples, riffs, ritmos de batería y voz, sin dejar al lado el toque Slipknot indiscutible. Be Prepared For Hell despide una escucha que resulta placentera, para nada tediosa y satisfactoria.

No hay duda...no estamos ante el mejor álbum de Slipknot (status que no creo que ninguno se lo vaya a quitar a Iowa), pero los de Des Moines vuelven a dejarnos un trabajo imprescindible en cuanto a metal con mayúsculas. Si a ello le añadimos el valor de reponerse ante adversidades tan salvajes como los reveses que han aguantado en los últimos años, .5: The Gray Chapter, se posiciona entre uno de sus discos más interesantes de escuchar, muy por encima de aquel Subliminal Verses, y casi al nivel de All Hope Is Gone.

Crítica: José Rojo

Agregado: November 27th 2014
Moderador: joserojo
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