Hacia ya un par de meses que no teníamos un concierto como dios manda por estos lares desde que hace un par de meses lo geniales RAGE visitaran...y ni corto ni perezoso me preste para acudir a la cita. Ya una vez en las inmediaciones de la sala me llamó la atención la de coches que había por la zona quedando aún sobre hora y media, y sobre todo el hecho de ver matriculas francesas por doquier aparte de las ya habituales de Cantabria, Asturias, Navarra, etc etc, un saludo para todos ellos!. Tras la espera de rigor el número de melenudos fue aumento por la zona hasta ver una de las mayores concentraciones que he visto nunca en esta sala, y afortunadamente las puertas se abrieron con puntualidad como temiendo el enfado de semejante muchedumbre. Decir también que pocas veces se ve tanto contraste entre el respetable, puesto lo mismo te encontrabas con un chaval que rozaba la edad “legal” para acudir al evento como que te encontrabas con alguno de la quinta de Halford...



A lo que iba...tome lugar (privilegiado por cierto) en la mismísima mitad de la primera fila aún imaginándome lo que me esperaba (iluso...)...sin mucha dilación y cuando aún quedaba muchísima gente por entrar comenzaron su descarga los daneses HATESPHERE. Lo primero que nos llamo la atención a los allí presentes fueron las pintas del tatuado frontman Jacob Bredahl, que más parecía que lo habían sacado de algún concierto de bandas del estilo de MILLENCOLLIN, NOFX... etc, gorra incluida. Y lo más preocupante, cubata en mano, mala señal. Estos daneses practican una mezcla de tra/hardcore/death por decir algo de ellos, porque por las opiniones que recogí tras su actuación no causaron muy buena sensación. No sería justo no mencionar la mala educaciñon de Jacod escupiendo en todas direcciones obsequiándonos con todo un variado repertorio de escupitajos y gargajos que quedaron cual adorno navideño colgados de los monitores, del propio escenario, de su barbilla, de su camiseta...y lo peor, encima de la indumentaria de cierta pobre fémina que de seguro de por ella haber sido lo habría degollado...decir a favor de la banda que cuando menos suena compacta, que no es poco.



Tras un breve descanso aprovechado por muchos (servidor inclusive) para ventilar los canales urinarios , EKTOMORF, la banda de los búlgaros hermanos Farkas se prestaron para aprovechar su escaso tiempo sobre las tabla con la intención de dejarnos un buen sabor de boca, cosa que según muchos lograron. Las similitudes con unos primigenios SEPULTURA dudo mucho que sea una mera coincidencia salvando las distancias puesto que por supuesto no incluyen ritmos blasileiros en sus piezas, pero lo diga quien lo diga, y sobre todo los aficionados al excesivo afán de innovación, viene bien de vez en cuando escuchar algo que nos suene a alguien de vez en cuando. El sonido no fue mu bueno enun principio, al pequeño vocalista apenas se le oia, pero pronto se arreglo y nos deleitaron con 8 cortes. Por cierto, se metieron a muchos en el bolsillo de antemano al saltar a las tablas su voceras con una vieja camiseta del “kil ‘em all” de los antiguos METALLICA. He aquí los temas que nos ofrecieron:



1. I know them

2. Destroy

3. A.E.A.

4. Gipsy

5. Show me your fist

6. The holy noise

7. Fire

8. Fuck you all



Y tras los búlgaros y tras otra pausa no demasiado larga por fin se acercaba unos de los platos fuertes de la noche y la tensión ya se mascaba en el ambiente, bueno, más que en el ambiente en nuestros cuerpos, puesto que como suele ser habitual la gente comenzó a intentar avanzar para acercarse al escenario lo más posible a costa de la compresión de los que allí ya estábamos. Y era comprensible, se trataban de los suecos DARK TRANQUILITY, uno de los mayores exponentes del llamado sonido de Gothenburg, y el más fiel al mismo. Las luces se apagaron y uno a uno todos los componentes del grupo fueron ocupando su lugar, todos menos el pelirrojo voceras Mikael Stanne, que apareció cuando ya comenzaban a sonar los riffs de ‘Lost apathy’, tema que eligieron como single de su última entrega discográfica, “Character” , tema que empalmaron con ‘Through smuged lenses’ también de dicho álbum. Es curioso como este pelirrojo (muy gracioso el tatuaje que lleva debajo del ombligo, “Redhead”) con la cara de buenazo puede cantar con tanta mala leche...Echaron la vista un poco atrás con ‘White noise/black silence’, retomando de nuevo la presentación de su nuevo trabajo con ‘The new build’. Cabe destacar que si bien el bajista Niklas intentaba ponerle un poco de gracia a la actuación y que el torbellino Stanne no paraba quieto también sería mentir no decir que la actitud del resto de la banda dejaba mucho que desear por muy grandes músicos que sean, sobre todo ambos guitarrista, que para mi que terminaron el concierto sin despeinarse, no solo apenas se movieron, sino que creo que no les vi esbozar ni las mínima sonrisa durante todo su recital, y sinceramente, esa lejanía o ausencia se puede interpretar como un desprecio hacia los allí presentes según quien lo mire, y de hecho al finalizar el show Mikael y Niklas bajaron al foso a estrecharlas manos de los allí presentes, mientras que los demás ni se dignaron. Alo que iba, continuaron con la genial ‘Scythe, rage and roses’ de su vetusto “Mind’s I”, al que le siguió ‘Wonders at your feet’ que desemboco en la demoledora “Punís my heaven”, para muchos el mejor tema que han compuesto jamás y que rindió a sus pies del todo a la enfervorizada audiencia. Con un tema bastante lento como ‘Negation’ retomaron de nuevo “Character”, poniendo punto y final (y perdón por el despiste, pero esto me pasa por no apuntar las cosas) no recuerdo muy bien si con ‘Final resistance’ u ‘Of chaos and eternal night’,me decanto por la primera...resumiendo, me esperaba un poquito más de estos suecos, fue una buena actuación (aunque el sonido no fuera lo mejor de la noche), pero sinceramente, esperemos que para la próxima pongo TODOS un poco más de entusiasmo.



Y al fin veíamos como poco a poco iban retirando todos los bártulos que hasta ese momento habían dejado el escenario de la sala Jam reducido a una mínima expresión del mismo, viendo como descubrían la batería de Ventor, con doble bombo y no doble pedal, como dios manda!...la espera se hacía eterna viendo como probaban las dos Jackson de Mille y Sami, así como el bajo de la misma firma de Speesy...y finalmente luces rojan aunciaban con la intro ‘Choir of the damned’ de fondo que todo estaba listo para la descarga de brutalidad, pero creo que nadie esperaba que fuera para tanto..y con ‘Enemy of god’ arranco a todo gas esta máquina germana de hacer thrash de la vieja guardia que ha recuperado el trono perdido; la batería de Ventor sonaba atronadora, mientras que los otros tres caballeros aireaban sus melenas en uno de los mejores temas de su nuevo álbum, eso si, con permiso de ‘Impossible brutality’, tema que poco pensábamos escuchar tan pronto temiendo por nuestras vértebras que ya tenían vida propia, cosa que no mejoro en absoluto con el salto en el tiempo que dieron con ‘Pleasure to kill’, un pequeño salto de 20 años nada más...



Para estas alturas la gente o energúmenos allí presentes ya empezaban a propasarse un tanto con los empujones y demás, y más de uno empezó a poner de mal humor debido a unos cuantos impresentables que no solo pedían ser levantados en volandas, si no que se tiraban sobre la gente sin ningún miramiento...’Phobia’ supuso el único toque que harían al “outkast”, y para sorpresa de muchos la velada iba a ser mucho más intensa de lo esperado desde un principio, de lo que fueron conscientes nada comenzar a sonar ‘The patriarch’, breve pieza instrumental que sirve de introducción a un tema que llega como un huracán, ‘Violent revolution’ se ha convertido por meritos propios en uno de los mejores temas que jamás han escrito, y uno de mis favoritos sin duda. Uno tras otro fueron cayendo los temas sin piedad, ‘World anarchy’, ‘Renewal’, la potente ‘Suicide terrorist’...y tras esto Mille se marco un un discursito acerca de la agresividad que se sentía en la sala, y animada a que fuera en aumento, cosa que debió animar a los citados energúmenos puesto que según empezó a sonar ‘Extreme agression’ empezaron a llover impresentables por encima de nuestras cabezas, afortunadamente más de uno aterrizó de cabeza en el foso para satisfacción de muchos que empezábamos a estar hartos de la gracia...’People of thelie’ y ‘Voices of the dead le siguieron, mientras que a ritmo de ‘UN DOS, UN DOS TRES CUATRO’ Mille anunciaba ‘All of the same blood’ que sono apabullante, asi como curioso resulta ver cantar a un batería como fue el caso de Ventor en ‘Riot of violence’. Llevábamos ya 14 canciones y parecía que solo habían sido 3 ó 4, por lo que ‘Terrible certainty’, ‘Reconquering the throne’ (un repaso más genial “Violent revolution” y toda una declaración de intenciones) y ‘Betrayer’ sonaron a gloria, tras las cuales todos dejaron sus puestos con Mille guitarra en alto, reapareciendo todos un par de minutos después (con Ventor a punto de deshidratarse...) para que Mille nos preguntara y sopesara si aún nos quedaban fuerzas para aguantar dos temazos más como lo son ‘Terror zone’ y ‘ la sanguinaria ‘Ripping corpse’, tras la cual Mille se puso a desproticar en contra de políticos, racistas y demás calaña diciendo que ya era tiempo de odiar y enarbolar la bandera del odio, y ‘Flag of hate’ fue lo que sonó para mi deleite, cerrando una magnifica actuación con ‘Tormentor’.



Años había esperado entre una cosa y otra para poder verlos, pero mereció la pena esperar...

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