“Ayer se cumplió un año de la tristemente muerte de uno de los vocalista más importantes de rock, STEVE LEE. Esta es la carta que nuestro colaborador David González escribe hablando de lo sucedido…”









El rock vuelve a quedarse huérfano. No contento con llevarse a Dio en mayo, ahora se tiene que llevar a uno de mis grandes héroes. Dios… ¿eres rockero a caso? Tu imagen difuminada generación tras generación del recuerdo de lo que eras: pelo largo, barba… podrías pasarte en la actualidad por uno de nosotros pero… ¿Es razón suficiente para que nos prives de estos grandes de la música? ¿O acaso creíste mejor llevártelos antes para que se cree la leyenda alrededor de sus vidas? En cualquier caso…ellos…no lo merecían.

Pero no escribo una conversación con dios, si no de lo que este hecho me ha afectado a mí personalmente y a toda la gente que eran fan de esta banda y que en definitiva amaba la buena música que hacían estos tipos.

Hoy prevalecía la sonrisa del ignorante, de la persona que permanecía impasible a tal nefasta noticia y que seguía con sus tristes vidas sin parar a pensar un momento en lo que el mundo acababa de expulsar de su terreno. No les culpo, al fin y al cabo…no les importa nada. En cierto modo les envidio por no tener que pasar por este mal estar interior que tengo desde que me entere de la noticia. Una sensación extraña invade mi cuerpo pensando que nunca volverá a deleitarnos con su voz.

Al escuchar sus discos no puedo impedir escucharlos con cierto respeto ¿Por qué? Antes era capaz de ponerme de “buen rollo” con sus canciones más movidas, de ponerme melancólico, y porque no decirlo, soltar alguna pequeña lagrima con cualquiera de esas baladas que cantaba con ese sentimiento innato que llegaban muy dentro.

Hoy al levantarme pensaba que en todos los medios de comunicación de nivel nacional, me refiero Radios y televisiones, estarían hablando de tal funesto accidente pero mi sorpresa fue que en ninguno mencionaran a tal figura de la música. ¿No es apto para vuestras cadenas comerciales? ¡Por favor! ¿El mundo acaba de perder a uno de los grandes iconos del Hard Rock y nadie se va a inmutar? Es bastante triste aunque me queda el consuelo de que los que llegamos a acariciar y a acoger a esta banda en nuestro seno tuvimos la suerte de conocerlos y disfrutar con su voz en vida y que ahora mismo lo están pasando tan mal como yo. A todos ellos… ¡ANIMO!

Por si alguien no se había percatado, lo cual espero que sí, estoy hablando de uno de mis iconos, uno de mis referentes de lo que era la felicidad y el buen hacer estoy hablando del gran Steve Lee, cantante del grupo suizo Gotthard.

Siento una sensación de abandono y aunque tenga un legado que abarca dieciocho años parece no ser suficiente.

Aunque no lo supieses, eras mi compañero en mis andadas siempre me acompañabas a cualquier lugar recóndito de la tierra porque tu música me hacia esbozar una sonrisa aun en los peores momentos y también en los mejores.

Ahora se lo importante que es el transcurso de la vida y que al menos ahora tengo una razón más para no temer a la muerte ya que tu estarás arriba cuando lleguemos y seguiremos rockeando en los cielos. Nosotros seguiremos buscando nuestro pedacito de “Heaven” allá en el que estés tú. Nosotros aquí seguiremos teniendo “Unconditional Faith” por ti y por tu banda. Como bien dijiste …“One Life One Soul” porque “All We Are” es “Rebel Soul”. Por fin acariciaras a “Sister Moon”.

Steve, allá donde estés, gracias. Permanecerás en el Olimpo con los más grandes “I Know You Know”.

A todos aquellos que se han visto afectados por tal aciaga noticia y que se han sentido vacios en un día como hoy ¡ “Lift U Up”! Animo compañeros. Estamos juntos en esto. “Nothing Left At All” hará que nos podamos olvidar de él.

“Dream On…”

Texto: David González Garbajosa