Artista: The Rolling Stones
Álbum: Bridges To Bremen
Sello: Eagle Rock
Continuando con la bonita costumbre que Eagle Rock ha adquirido de ir soltando bombas en directo de Rolling Stones, ahora le toca el turno a Bridges To Bremen, que, junto a la anterior dedicada a la gira de Voodoo Lounge, me parece una de las más interesantes de cuantas se han editado hasta la fecha. ¿Por qué?...pues muy sencillo. Como ya sabéis, la etapa noventera y más grandilocuente en cuanto a montaje de los Stones, fue, para muchos, el inicio de su amor por la música de los ingleses. Para muchos otros, la reconfirmación de que una banda como ellos puede tener una segunda juventud. Algo que se demuestra sobradamente en el documento nos ocupa.
Me ha encantado el cuidado que ha tenido la compañía al ofrecer un cuidado digipack, de precioso diseño, con el león en color dorando de la bonita portada de Bridges To Babylon, el disco que se presentaba en la gira. Elegante y totalmente representativo de la época que trata de plasmar, que se ve también representada en la infinidad de recortes que se pueden ver bajo los discos del tríptico que recoge el poderoso directo. Impresionante packaging de diez, y, probablemente, uno de los más atractivos que haya visto un disco de Rolling Stones.
En cuanto al contenido, lo que encontramos es el famoso concierto, uno de los últimos de la gira, del The Bridges To Babylon Tour (famoso tour por incluir dos escenarios), concretamente en el Weserstadion de Bremen ante 40.000 almas deseosas de lengua. El escenario fue uno de los más bonitos de la carrera de la banda, cuando estaba de moda aquello de utilizar enormes pantallas, efectos visuales y estructuras mastodónticas...realmente, cuando el mainstream se encontraba más en alza, y la tecnología avanzaba a pasos de gigante. Se nota la pasión en una banda compactada, que derrocha energía, actitud (que aún tienen), y en cuanto a la restauración de audio y video, decir que ha quedado sencillamente espectacular, y que, a pesar de ese poso de pantalla noventera que se ha conservado, el documento se ve y escucha escandalosamente bien...principalmente, porque se han usado las grabaciones y cintas originales para restaurar audio y video, y eso, se nota. Y sin ahondar en el set, porque no se trata de eso en una colección de directos, puedo decir que si ya me gustó el resultado de Voodoo Lounge Uncut, todavía me gusta más el de Bridges To Bremen, principalmente, porque esa pantalla redonda, los detalles del atrezzo, pirotecnia y demás factores visuales, alegran y dan vida, todavía más si cabe, a una grabación en directo realmente épica.
Además de todo ello, hay cuatro video bonus, mostrando temas filmados en Chicago, así como la parte audio, que ha sido tan bien restaurada, que bien podría haber sido editada en su día sin el formato vídeo, logrando, seguro, un superventas, y que hoy se considerase uno de los live albums imprescindibles de la historia del rock. Pero, como nunca es tarde, aquí tenemos, en 2019, uno de los lanzamientos más poderosos del año, no solo por la carga emocional, histórica y musical que pueda tener, sino porque muy pocas veces una reedición en video se ha tratado con tanto tacto, como para mejorar el original de modo tan sobresaliente, creando un producto indispensable.
José Rojo